Cada vez que tropiezas, levantate y sigue. Me parece a mí que esto es mucho más fácil cuando te lo dicen que cuando tienes que hacerlo, y más cuando eres una persona tan "torpe" como yo que parece que aun no he terminado de levantarme y ya me estoy cayendo otra vez.
Tengo las rodillas entumecidas de tanto golge contra el suelo, la espalda dolorida por el esfuerzo de levantarse, rascazos y moratones por los golpes recibidos, me duele todo. Pero siempre esa vocecita que te dice, no flaquees, levantate, sigue intentandolo.
Jeje, no me quedan fuerzas, hoy no, pero veremos como lo haremos, pues no quiero rendirme tan pronto, no en esto.
LLevo un tiempo retomando viejas costumbres y reencontrandome con sensaciones y costumbres que hechaba de menos y entre otras muchas cosas me suben la autoestima, cosa que no debía ser muy dificil al estar práctimamente desaparecida.
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