Cuando me encontraba en la oscuridad, y los sueños de caballeros y dragones se mezclaban con canciones de melancolía, apareciste tú, con el rojo de la pasión en tu pelo y una sonrisa para tenderme la mano y disipar las brumas que tapaban el camino. Lo cual implica otro nuevo giro inesperado en otro día que cambia la trayectoria y me dibuja sonrisas por nada, disfrutando de la música mientras escribo e improviso.
Complicaciones, dificultades y organización, pero como acordamos , las cosas bien hechas bien parecen; y sin prisas por favor, que no nos faltará tiempo y recuperada la esperanza, esto avanza pasito a pasito, con un poquito de vértigo para no desentonar, pero que desaparecerá cuando menos lo esperemos y que sea lo que Dios quiera, porque pienso disfrutar cada latido.
No tengo un caballo ni armadura ni espada, pero como los caballeros que rescatan a las princesas, la gesta es más fácil con tu ayuda, y un guiño en tus ojos, una canción en mis oídos y un dulce sabor en los labios.
Seguimos girando Miau! =^.^=
