lunes, 21 de noviembre de 2011

Siete vidas tiene un gato

Continuo intentando acercarme a ese momento de inspiración puro, ese que te quita el aliento y en el que te observas actuando desde lo alto, cuando tu cerebro intercala esa conversación  con ideas de ti mismo en las que te das cuenta que no pareces tú; ese momento que no podrás volver a repetir.

Te alejas y me apago como una cerilla, mi confianza se evapora e intento continuar solo, no es fácil, invento situaciones y me descubro a mi mismo perdiendo vidas como en un videojuego, gastando moneda tras moneda tras cada "INSERT COIN" en la pantalla; mis movimientos son lentos y todos los enemigos parecen más rápidos que yo, más preparados, con movimientos más letales. 

En el último enfrentamiento, tu tardía aparición en superioridad numérica, había mermado toda posibilidad por mi parte, cuando ibas colgada del pasado y, esa breve conversación remato una tarde que buen tiempo tardaré en olvidar, para mi desgracia. De las siete vidas que se supone que tiene un gato, tres y dos ya las perdí.

Cinco en total sino me equivoco, alguna más dura que otra, las tres primeras antes, cuando buscaba la inspiración, y cuando creía haberla encontrado, desaparecieron entre lágrimas;

Y las otras dos contigo, una por año desde que abrí los ojos,  pero me tiemblan las piernas y no veo posibilidad de victoria, en lo más profundo prefiero esto, saber que en un posible cruce antes o después se esfume la magia, esa que nace de lo idílico y me saca una sonrisa cada mañana, aunque cuando oscurece se torne gris y sombría.

Me quedan otras dos, la seis la estoy jugando, e intento no dar movimientos en falso, me acerco demasiado al precipicio y el silencio del barranco retumba en mis oídos. La hostia es considerable si me la pego desde aquí, así que vuelvo un paso atrás y espero, busco ese aliento que me ayude a dar el salto, pero no al precipicio, sino en una prueba para medir la distancia a batir y me doy cuenta que no estoy preparado. Me queda mucho entrenamiento todavía y debo esperar a que la distancia sea más corta. Solo me quedan dos y no hay que gastarlas a lo tonto, pues la última que me queda la tengo reservada.

=^.^= Miau!

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